Como médico de Sanitas me aseguro de que mis pacientes pediátricos reciban una atención personalizada, integral, familiar y enfocada en la calidad. Y me aseguro de que las familias sepan que tienen acceso a nuestros equipos de cuidado en cualquier momento. Un buen día de trabajo es cuando impacto positivamente a un niño, en cualquier aspecto no solo médico. Por ejemplo, encuentro recursos para familias que tienen deficiencias alimentarias, o puedo aprender sobre problemas de salud mental en un adolescente que está afectando la dinámica familiar y puedo obtener los recursos necesarios para sanar. Mi padre es de Puerto Rico y mi madre es de República Dominicana, pero nací y me crié en el noreste. Fui la primera en mi familia en completar la universidad y trabajé a tiempo parcial para ayudar a mantener a mi familia hasta que comencé mi tercer año en la facultad de medicina. Al crecer, mi familia tenía acceso limitado a profesionales médicos que hablaran su idioma y entendieran su cultura. Estudié medicina porque quería marcar la diferencia en algunas de las disparidades de salud que las familias todavía enfrentan hoy. Cuando no estoy trabajando, disfruto viajar con mi familia, principalmente a lugares cálidos para poder pasar tiempo en la playa. También me gusta leer y escuchar música.