Nací y crecí en Pinar del Río, Cuba y me mudé a los Estados Unidos en 2007. Tengo una muy buena conexión con Miami, una ciudad llena de diferentes culturas y debido a mis raíces este es el lugar al que llamo hogar. Con mi conocimiento y dedicación, puedo mejorar la calidad de vida de mis pacientes en este increíble lugar. El español es mi primer idioma, pero también puedo hablar inglés con fluidez. Cuando llegué a Estados Unidos, fui a una escuela de inglés para aprender el idioma, y ​​este fue un paso importante para mi futuro como profesional. Decidí dedicarme a la medicina porque estaba fascinado con el cuerpo humano y cómo funciona. Ahora disfruto mejorando la salud de las personas todos los días, prolongando sus vidas y mejorando su calidad de vida. Un buen día de trabajo significa que mis pacientes salen de la oficina con una gran sonrisa y podemos notar que están satisfechos con nuestra atención. Quiero que sepan que en Sanitas todos los pacientes pueden sentirse cómodos, seguros y en casa mientras reciben atención médica de la mejor calidad. Cuando me quito la bata, me encanta pasar tiempo con mi familia. Nos gusta viajar, salir a cenar, hacer deporte, leer un buen libro y escuchar música.